Enredando hilos

Yo soy una hija de la Generación X, nos dijeron que estudiaramos y triunfaríamos, nos contaron que trabajasemos duro y triunfaríamos. Nos vendieron la moto y nos la compramos, con todo lujo de accesorios.

Ahora nos encontramos en los treinta y muchos y esa X que marcaba la incógnita se ha despejado, la X es una D, una D gigante que nos aplasta.

La D de Decepción, ¿dónde están todas esas oportunidades que íbamos a tener con nuestros títulos universitarios, con nuestros idiomas?. Con nuestro trabajo. Cititius, altius, fortius, sigue, sigue, más, más, y lo dimos todo. Y si hay suerte (demonios, es increíble que considere a esto suerte) tendremos un trabajo de mileurista o milpoco eurista y estaremos sobreexplotados, pero seguiremos dándolo todo porque hay otra D. Damocles con su espada en forma de hipoteca a 40 años. Sigue, sigue, más, más…

La D de Desconcierto. ¿Porqué? Si yo lo hice todo bien, estudié, aprendí mis idiomas, acepté becas porque por algún sitio había que empezar. Me inquieté con la llegada del euro porque vi que la vida subía pero como estábamos cegados por el futuro brillante que teníamos delante pensamos que pasaría. Que progresaríamos, que sería un bache. No lo fue.

La D de Desencanto, ahora lo sabemos, lo hemos sufrido en nuestras carnes, todos los dias recibes alguna llamada de algún amigo que también se ha quedado en paro. Y te quedas perplejo y los ves aceptando un trabajo cualquiera, cualquier trabajo. Lo que sea, porque en un momento dado nuestra generación tan egoísta tan centrada en si misma decidió tener un niño. Sólo uno, no da para más si queremos que tengan nuestras mismas oportunidades, pero… ¿qué oportunidades van a tener? ¿Las mismas que nosotros? Pues vaya plan

La D de Desengaño, Que según la Real Academia de la lengua es el conocimiento de la verdad, con que se sale del engaño o error en que se estaba. Qué mas da lo que haga, me dijisteis que tenía el mundo en mis manos, que todo dependía de mi misma y todo era mentira. Qué Desilusión señores, qué Desilusión (anda mira, otra D…)

La D de Detenidos en nuestros sueños por unas circunstancias que no hemos sido capaces de prever, corriendo en círculos, intentando salvar los muebles. Golpeando un techo de cristal que nadie nos contó que existía.

La D de Desmotivados porque vemos que por más que nos esforzamos estamos en medio de unos jefes con mentalidad del siglo XX mientras que los que vienen detrás nos piden cambios que no nos dejan aplicar porque siempre se ha hecho así. Porque nos hemos chocado mil veces con la misma pared esperando que esa vez fuera diferente, que esa vez cedería y no, no cede. La hemos intentado saltar, rodear y nos estamos empezando a cansar.

Nosotros, que una vez fuimos JASP (Jóvenes Aunque Sobradamente Preparados), nos hacemos la pregunta del millón, ¿y ahora qué? ¿Qué podemos hacer? Fuimos jovenes promesas, lo teníamos todo claro pero ahora no sabemos cómo actuar. Si, también estamos Despistados

Generación X*Tiempo = D (escojan la suya)